En el Congo la situación sociopolítica ha empeorado sensiblemente en los últimos meses a causa, entre otros motivos, de la pandemia de coronavirus.
La crisis económica, consecuencia del prolongado confinamiento, ha detenido muchos proyectos de desarrollo y ha agudizado las tensiones entre la ciudad y el campo. La violencia ha aumentado en todas pares y el principal blanco esta vez parecen ser las escuelas y los niños.
Algunos grupos armados que habían firmado una tregua con el nuevo gobierno han vuelto a las armas. A finales de agosto fue atacado un centro educativo donde se estaban haciendo exámenes de acceso a ciclos superiores y dos niños fueron asesinados.
Mientras seguimos con preocupación esta situación, la escuela que lleva el nombre de Floribert Bwana Chui, en el barrio de Mugunga, ha reanudado las clases respetando todas las medidas de prevención contra el covid-19 con sus 400 alumnos.
Mientras tanto, 16 jóvenes que en los últimos años han estudiado en esta escuela, han superado los exámenes oficiales y podrán acceder a estudios superiores.