El jueves 30 de enero una delegación de la Comunidad de Sant’Egidio encabezada por Andrea Riccardi participó en Tirana en al funeral de Su Beatituud Anastasio, primado de la Iglesia ortodoxa de Albania.
Presidió el funeral Bartolomé, el patriarca ecuménico de Constantinopla. Una muchedumbre emocionada acompañó ya los días anteriores a Anastasios, pastor bueno y padre espiritual de una Iglesia que ha sabido renacer de las cenizas humanas y materiales del tiempo de Enver Hoxha.
La amistad que lo unía a la Comunidad de Sant’Egidio desde hace tiempo se alimentó de su obra incansable de diálogo ecuménico e interreligioso y de fomento de la paz entre los pueblos.
Aprovechando la ocasión, Andrea Riccardi visitó las Casas Rojas, las viviendas compartidas por enfermos con problemas psiquiátricos que la Comunidad abrió en Tirana y que son una alternativa al hospital psiquiátrico que en 2012 cerró gracias a esta iniciativa. Gestionan las dos casas, donde actualmente viven 18 personas, Sant’Egidio y el Ministerio de Sanidad albanés, y constituyen un modelo de atención de una sanidad más humana e inclusiva.
