También este año, una delegación de la Comunidad de Sant'Egidio de Roma, Nápoles y Würzburg se encuentra en Chipre para celebrar la Navidad y el Año Nuevo con los refugiados de los campos de Pournara y Kofinou y con los menores no acompañados del refugio de Larnaca.
El clima de miedo y ansiedad por la situación en el cercano Oriente Medio es palpable en la isla. En las últimas semanas se han reanudado en gran número los desembarcos de poblaciones que huyen, especialmente de Siria.
La presencia de Sant'Egidio entre los inmigrantes es cada vez más familiar. Después de la experiencia de los dos últimos veranos y de la visita de las pasadas Navidades hay expectación, con la certeza de una amistad fiel.
La reapertura de la Tienda de la Amistad en las afueras del campo de refugiados de Pournara es un signo de esperanza. Nada más montar la pancarta con el nombre y logo de la Comunidad, llegaron a jugar juntos los niños, las familias y los refugiados que durante el verano se sumaron a los voluntarios que venían de toda Europa para apoyar su labor solidaria.
Durante la celebración con los niños, a todos se les ofrece un paquete de alimentos como "regalo de Navidad", medido en función del tamaño del grupo familiar, que a veces es muy numeroso. Además de en Pournara, las distribuciones también se realizan en el campo de Kofinou. De esta manera se espera llegar al menos a 1.700 familias.
