El martes 4 de abril, dos familias de refugiados sirios (de Homs y Hassaké) que vivían en campos de refugiados en el Líbano llegan al aeropuerto de Roissy-Charles-de-Gaulle con un vuelo de Air France procedente de Beirut. Se trata de familias que, en los últimos meses, han sufrido un grave deterioro en sus condiciones de vida debido a la grave crisis política, económica y social del país.
Su entrada en Francia es posible gracias a los corredores humanitarios impulsados por Sant'Egidio y las Semanas Sociales, en convenio con los Ministerios del Interior y de Asuntos Exteriores.
En total, más de 6.000 refugiados han llegado a Europa gracias a este proyecto desde 2016, incluidos casi 600 en Francia desde marzo de 2017.
Las familias acogidas iniciarán un proceso de integración: para los menores con la escolarización inmediata, para los adultos con el aprendizaje de la lengua francesa y, una vez obtenida la condición de refugiado, con la entrada en el mundo laboral.
Las historias de los que ya han llegado muestran que es posible no solo salvar a los que corren el riesgo de caer en manos de los traficantes de personas, sino también iniciar programas de integración. En un momento en que salvar vidas humanas parece cada vez más urgente, como recordó el Papa Francisco en su reciente audiencia con los refugiados llegados gracias a los corredores humanitarios, el modelo lanzado por Sant'Egidio ha visto crecer la solidaridad, gracias a la generosidad de muchos franceses y al compromiso gratuito de más de 3.000 voluntarios.
Más información sobre los corredores humanitarios en Francia: www.couloirshumanitaires.fr
