MIGRANTES

Llega un corredor humanitario desde el Líbano: “un gesto de paz”. Casi 100 personas que huyen de la guerra son acogidas en Italia y en Francia. Entre ellas, muchos niños que finalmente están a salvo

Impagliazzo: “En vista de la situación internacional, hay que ampliar los corredores humanitarios desde el Líbano

Esta mañana había alegría y emoción en el aeropuerto romano de Fiumicino por la llegada de 51 refugiados sirios en un vuelo regular proveniente de Beirut con los corredores humanitarios impulsados por la Comunidad de Sant’Egidio y por las Iglesias protestantes italianas, en colaboración con los ministerios de Interior y de Exteriores. Vienen del Líbano en guerra. Algunos, de las zonas directamente afectadas por las operaciones militares de estos días. Mientras eran recibidos en el gran vestíbulo del aeropuerto, 42 personas más, que han llegado en el mismo avión, hacían transbordo en Roma e iban directamente a París, también gracias a los corredores humanitarios. Se trata de nueve núcleos familiares. La mayoría (22) son menores. En Francia tienen el mismo recibimiento y siguen el mismo itinerario de integración.

Tras años en los campos de refugiados de la Becá o en viviendas precarias de la periferia de la capital libanesa, ahora el nuevo conflicto hace la vida imposible para unas personas que tienen derecho a ser acogidas pero no tienen a nadie que se ocupe de ellas.

Hoy se han visto abrazos entre parientes que se reencuentran, sonrisas y alguna lágrima, porque a partir de hoy empieza aquella tan deseada paz, que se llama futuro en Italia. Los refugiados que han llegado al aeropuerto de Fiumicino serán trasladados a siete regiones distintas (Calabria, Campaña, Lacio, Liguria, Lombardía, Piamonte y Toscana). Los niños se matricularán inmediatamente a la escuela y los padres aprenderán la nueva lengua y empezarán a trabajar. En definitiva, empieza para ellos una nueva vida.

“Vuestra llegada es un gesto de paz –ha dicho el presidente de Sant’Egidio, Marco Impagliazzo–. Desde hoy somos todos una misma comunidad, a la que os damos la bienvenida. Teniendo en cuenta la situación internacional, queremos ampliar los corredores humanitarios, porque son una gran respuesta para vosotros y también para nosotros, para Italia”, ha añadido Impagliazzo, que luego ha criticado la reciente iniciativa de los centros de retención de Albania: “Cuantos más muros se levantan, más crece la inmigración irregular. Cuanto más muros se derriben y más aumenten los flujos regulares y los corredores humanitarios, más disminuye el sufrimiento de los migrantes y la actuación de los traficantes”.
Además del presidente de Sant’Egidio, han intervenido en la conferencia de prensa Pierfrancesco Sacco, del ministerio italiano de Exteriores, y la viceprefecta Carla Di Quattro, del ministerio del Interior. Daniele Garrone, presidente de la Federación de Iglesias Evangélicas,
ha destacado que “el verdadero desafío” que plantean las migraciones es “qué tipo de democracia y de Europa queremos ser en el futuro y si queremos estar a la altura de nuestras constituciones, de aquel descubrimiento de los derechos humanos que hicimos tras la Segunda Guerra Mundial y tras grandes dictaduras”.