“La Italia de las puertas abiertas, porque merecéis acogida”. Los corredores humanitarios llegan a 3000 vidas salvadas.

Ya son mas de tres mil. Las vidas salvadas, las personas integradas en Europa a través de los corredores humanitarios. La llegada de 113 refugiados desde el Líbano, recibida con una conferencia de prensa de bienvenida en el aeropuerto de Fiumicino, muestra que es posible salvar a quienes corren el riesgo de caer en manos de traficantes de personas y comenzar caminos de integración.

En una Italia que abre sus puertas, el compromiso es de la sociedad civil, compuesta por familias, comunidades y parroquias que han seguido la iniciativa promovida por Sant Egidio, FCEI y la Mesa valdense. Tres años y medio después de la primera llegada, confirmamos que es bueno mantener las puertas abiertas, "porque merecéis nuestra bienvenida", dijo Marco Impagliazzo, presidente de la Comunidad de Sant'Egidio, invitando a los recién llegados, nuevos italianos, a abrir también ellos las puertas de la acogida que recibirán. Una forma de hospitalidad que pasa también por la oración por Siria, donde la guerra aún no ha terminado. La vicepresidenta de FCEI, Christiane Groeben, dio la bienvenida recordando cuando, en febrero de 2016, se abrieron las puertas de la sala de llegadas internacionales de Fiumicino para dar la bienvenida a la primera familia proveniente de Beirut.

Francia, Bélgica y Andorra han replicado los corredores humanitarios y han traído, junto con Italia que ya ha acogido a 1800 personas, a un número que no es nada insignificante puesto que no hay medidas posibles para valorar cada vida salvada. Sin embargo, se necesita una respuesta compartida entre los gobiernos del continente, un corredor humanitario europeo, para liberar a las personas de la "trampa libia", - como lo definió la pastora Thesie Mueller de la Mesa Valdense en su saludo, - un drama humanitario para el que debemos abrir una vía de entrada, como se hizo para Siria y el Cuerno de África.

Stefano Bettera, de la Unión Budista Europea, se unió a la recepción de los recién llegados con los corredores humanitarios, proyecto que apoyó con entusiasmo, y deseó que todos se integraran en las comunidades de acogida como hermanos y hermanas.

LA LLEGADA A FIUMICINO

CONFERENCIA DE PRENSA

 

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