Desde hace muchos años los amigos de la Comunidad de Sant’Egidio de Mali visitan a los ancianos del "pueblo" de leprosos de Bougouba , en el distrito de Djicoronipara de Bamako.
Bougouba, nos escribe Emanuel, responsable de la Comunidad, está dentro de la ciudad. En este "pueblo" viven unas 2000 personas, muchas de las cuales, sobre todo ancianos, todavía llevan en su cuerpo los signos de la enfermedad.
Hasta hace unos años, muchos leprosos y sus familias se dedicaban a la agricultura y así disponían de alimentos porque alrededor del pueblo había terrenos. Lo que no necesitaban para consumo propio lo vendían en el mercado. Era una especie de economía doméstica de mucho valor para el sustento de las familias.
Con la urbanización de los últimos años, aquel valioso espacio agrícola ha ido disminuyendo, los problemas alimentarios han aumentado y muchos amigos nuestros se han visto obligados a salir a la calle a pedir limosna.
Un "pueblo" de familias de pobres y enfermos que tenían un mínimo de autosuficiencia pero han caído en la pobreza.
En este complicado contexto, los jóvenes de la Comunidad van a visitar cada semana a sus amigos ancianos, hacen fiestas y cuidan a los más débiles, llevándoles medicinas, jabón, ropa y alimentos. Como nos dijo Ahmed, un anciano gran amigo nuestro, "Vosotros sois los únicos que no os habéis olvidado de nosotros".