La oración por la paz, la primera defensa de la guerra. Por iniciativa de la Comunidad de Sant'Egidio de Eslovaquia, en la catedral de San Martin, en la capital de Eslovaquia, rezamos por la paz en Ucrania y por la reconciliación entre los pueblos, por todos los que en el mundo sufren la guerra, por los refugiados que se ven obligados a huir. Se nombraron uno por uno todos los países, regiones del mundo en guerra y las tierras afectadas por la violencia. Mientras el coro cantaba el Kyrie eleison, se encendió una luz de paz para cada país.
El primer ministro eslovaco, Eduard Heger, también participó en la oración, junto con el arzobispo de Bratislava, Mons. Stanislav Zvolensky. Los obispos europeos del Ccee y del Comece estuvieron presentes en la catedral, junto con los participantes en las Jornadas y representantes de las Iglesias protestantes. También participaron numerosos amigos pobres, invitados por la Comunidad.
“Que el Evangelio de la paz resuene en cada uno de nosotros y nos movilice”, dijo el reverendo Christian Krieger, presidente de la Conferencia de Iglesias Cristianas Europeas (Kek). “La paz es frágil, y pensándola ya adquirida, hemos abandonado el trabajo de reconciliación”, agregó.
El arzobispo de Bratislava subrayó que los refugiados necesitan encontrar una familia, y para ello se necesitan comunidades que los acojan. El Primer Ministro agradeció a la Comunidad su servicio a la paz, hecho de oración y trabajo.
Al final, el Arzobispo de Bratislava invitó a todos los presentes a una cena común, a la que también asistieron amigos de la calle invitados por la Comunidad de Sant'Egidio.
