Durante la pandemia, la situación de aislamiento y reclusión de los ancianos que viven en residencias es un fenómeno global. También en Asia las medidas de contención del contagio han impedido que durante meses los ancianos recibieran visitas o pudieran estar con parientes o amigos.
Como en otras partes del mundo, Sant’Egidio se las ha ingeniado para sortear dicha situación: videollamadas, envío semanal de caramelos, comida buena y cartas.
En Indonesia el 29 de mayo se celebra el Día Nacional de los Ancianos. Es una fiesta que proviene de la independencia del país, que en 1945 eligió esta fecha para rendir homenaje a la aportación de los ancianos a la creación de la República.
En ocasión de este Día, Sant'Egidio ha logrado que algunos voluntarios entraran en 5 residencias de ancianos del archipiélago para hacer unos momentos de fiesta presencialmente, tras haberse hecho la prueba y siguiendo todos los protocolos y manteniendo la distancia. Los distintos actos se han conectado por web, de manera que en cada residencia podían ver los actos que se hacían en las otras, creando así un encuentro virtual en el que han participado unos 150 ancianos con sus amigos y los voluntarios.
El vídeo de los Jóvenes por la Paz en el que estos afirmaban la importancia que tienen los ancianos para ellos, el saludo cruzado entre las islas de Java y Sumatra, entre Timor y Roma, han creado un acto que ha roto el aislamiento y ha vuelto a encender el entusiasmo y la esperanza de que el fin de la pandemia no está lejos.