Esta mañana, a primera hora, ha aterrizado el avión de línea del corredor humanitario que traía a Italia a 58 sirios que se sumarán a los más de 2000 que han llegado desde 2016 con este proyecto que se propone como vía legal y segura para quien huye de los conflictos más terribles de nuestro tiempo.
Son mayoritariamente menores. La voz alegre de los niños, recibidos con globos y juegos, ha llenado el aeropuerto, suscitando alegría y emoción. Hay varias familias numerosas, que han pasado años en el campo de refugiados de Tel Abbas o en otros campos del valle de la Beká y de la región de Akkar. Como siempre, son cristianos y musulmanes y provienen de varias ciudades de Siria.
Han sido recibidos por los representantes de las instituciones, junto a los representantes de Sant’Egidio, de la Mesa Valdense y de la Federación de Iglesias evangélicas, impulsores y "alma" de los corredores.
La viceministra de Exteriores de Italia, Emanuela del Re, no esconde su emoción: "Este es un proyecto de vida: vuestros hijos crecerán con los nuestros y no hay nada más hermoso", dice entre aplausos. Y se suma a sus palabras la subprefecta Donatella Candura, del Ministerio de Interior, que expresa su satisfacción por poder participar en un proyecto que salva tantas vidas.
"Hacer el bien es posible", afirma con fuerza Marco Impagliazzo, presidente de Sant'Egidio hablando directamente a los refugiados. "Los corredores humanitarios son el signo de una Italia unida, porque vosotros sois acogidos por algunas realidades cristianas y por las instituciones. Sabéis que ante los refugiados el mundo está dividido, pero hoy aquí veis a un Italia unida porque toda Italia está unida alrededor de los corredores humanitarios. Vosotros representáis a millones de sirios que todavía son refugiados. Vosotros sois una pequeña fuente de esperanza que se convierte en un gran río de solidaridad europeo".
E invita a todos a pensar en todos aquellos que han perdido la vida por no encontrar vías de acceso legales: "Recordemos a aquellos que hoy ya no están con nosotros porque han tenido que emprender viajes de muerte. Los recordamos en nuestra oración. Muchas personas han muerto porque han terminado en manos de traficantes de personas. La muerte en el mar no puede ser una opción para Europa, los corredores humanitarios son la única opción para nosotros".
El deseo de que se abran corredores humanitarios europeos, reclamados también por Luca Negro, de la Federación de Iglesias evangélicas, es compartido por todos.
Hoy se celebra el Aid al Fitr, que cierra el mes del Ramadán. Es la fiesta más importante para todos los creyentes del islam. A la llegada a Fiumicino, todos los niños –cristianos y musulmanes– han recibido un regalo, y los adultos, el libro "L'italiano per amico" con un cuaderno que han preparado alumnos de una escuela de Padua con una dedicatoria de bienvenida. Les servirá para empezar el itinerario de integración que es un aspecto fundamental de los corredores humanitarios.