-20. Una temperatura difícil incluso de imaginar en nuestro país, pero realidad invernal normal en los países del norte y del este de Europa. En la lucha por la supervivencia –porque de eso se trata– quien no tiene hogar necesita el apoyo de los voluntarios que no se quedan mirando sino que van a buscarles en los subterráneos de las estaciones, y en otros lugares donde se cobijan, y les llevan comida caliente, mantas y una compañía amiga.
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