Esta mañana, más de mil Jóvenes por la Paz de la Comunidad de Sant’Egidio provenientes de toda Europa han homenajeado a los caídos en las Fosas Ardeatinas. La visita ha empezado con una asamblea en la gran explanada del Sagrario. Estaban presentes, además del presidente de Sant’Egidio, Marco Impagliazzo, y el coronel Francesco Sardone, director del mausoleo, el rabino jefe de Roma, Riccardo Di Segni, que ha recitado una oración y ha pronunciado un saludo recordando el aniversario de las leyes raciales italianas de 1938 y advirtiendo contra la reaparición de nuevas formas de antisemitismo y racismo en Europa, también en nuestro país.
Al final de la asamblea se leyó un llamamiento en el que se afirma que hoy, muchos años después del final de la II Guerra Mundial, "la violencia no ha sido derrotada". Tanto es así que sigue "contaminando" los países europeos: "Asume el rostro de la indiferencia, se alimenta de la ignorancia, de los prejuicios, del antisemitismo, del racismo... Los pobres y los débiles son los primeros que sufren sus consecuencias: ancianos, discapacitados, migrantes, refugiados, gitanos, personas sin hogar". De ahí el compromiso a "trabajar por una Europa en la que todos puedan vivir juntos" luchando contra toda violencia y siguiendo "el camino del encuentro y de la amistad".
La ceremonia –que se ha celebrado el último día del encuentro internacional Global friendship to live together (que empezó el viernes con jóvenes de todos los países europeos)– se ha concluido con una peregrinación silenciosa a la cantera donde el 24 de marzo de 1944 fueron asesinados 335 inocentes y a sus tumbas, ante las cuales todos han rendido homenaje depositando una flor.
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