La Comunidad de Sant'Egidio en Hong Kong recibió recientemente la visita del presidente Marco Impagliazzo, que hoy inauguró la conferencia "Amigos de los pobres, amigos de la paz".
En la gran ciudad asiática, el desarrollo económico y la modernidad conviven con formas de pobreza extrema, como la de muchas personas sin hogar.
Para ellos, la Comunidad - que desde hace años hace servicios en las calles, con distribución de alimentos, apoyo sanitario, acompañamiento para las necesidades de la vida - ha abierto la "Casa de la Misericordia", una casa que ha permitido dejar la vida de la calle a varias personas. La visita de Marco Impagliazzo es la oportunidad de inaugurar la reforma de esta casa, que permite acoger a nuevos huéspedes. Una ocasión alegre, como lo subrayó uno de ellos, que, al saludar al presidente de la Comunidad, dijo: "Viví en la calle durante 50 años. Ahora, ya viejo, por fin tengo una familia".
El obispo de la ciudad, Card. Stephen Chow. mostró su agradecimiento y animó a la Comunidad a seguir adelante con todo lo que está haciendo en Hong Kong.