En estos días unas intensas lluvias torrenciales han devastado la parte sur de la provincia de Mozambique. Una gran masa de agua y la corriente que ha provocado la apertura del dique del Liombo (que recoge las aguas provenientes de la homónima cadena montañosa que se alza detrás de la capital) han inundado la llanura del distrito de Boane, en el extremo sur de Mozambique.
Unas 20.000 personas han perdido su casa. Por desgracia ha habido muchas víctimas, incluidos menores, que han sido arrastrados por la fuerza del agua. Algunas personas se han salvado reparándose encima de los techos o encaramados en los árboles más altos.
La principal carretera entre Boane y Maputo sigue estando bajo metros de agua, y solo se puede llegar hasta el lugar por una pista que recorre las colinas por su parte más alta.
La ayuda de la Comunidad ha sido de las primeras en llegar. El domingo, 12 de febrero, se repartieron mantas, paquetes de alimentos y agua potable entre quienes habían perdido su casa y estaban alojados en salas de la parroquia, que es la única parte aún practicable del complejo de la iglesia católica. La casa donde se alojan los sacerdotes también fue evacuada con urgencia con embarcaciones de auxilio.
La Comunidad de Maputo está buscando más ayuda para llevar los próximos días.