La comunidad de Sant'Egidio en Uganda está cada vez más presente en las periferias y con los pobres. En las fotos podemos ver a los Jóvenes por la Paz de Kampala visitando algunas residencias de ancianos de las afueras de Nakulabye y Makerere, ayudando y acompañando a personas a menudo abandonadas a su destino, obligadas a vivir en casas de barro y ladrillos, sin baños, expuestas a las incertidumbres del clima y situadas en zonas muy difíciles de la ciudad.
La visita también es una oportunidad para ser útil, ya que aporta no solo la calidez de la amistad, sino también una ayuda concreta: lavar la ropa o preparar la comida. Estos son gestos que hacen que los ancianos sienten que forman parte de una familia nueva y más grande.