En Uganda se vive enmedio de las dificultades causadas por la pandemia y las medidas necesarias puestas en marcha por el Ministerio de Educación de Uganda para limitar la infección en las escuelas. Sin embargo, en la escuela primaria de la Escuela de la Paz de la Comunidad Sant'Egidio, en el campo de refugiados de Nyumanzi en el norte de Uganda, continúan las actividades. En estos meses, al menos para parte de los alumnos, ha habido outreach schools (realizadas con visitas domiciliarias y lecciones en pequeños grupos al aire libre).
Después de largos meses de confinamiento, finalmente los estudiantes han ido regresando gradualmente en las últimas semanas. Para los 500 estudiantes ya admitidos para regresar a las lecciones presenciales, que suponen aproximadamente la mitad de los inscritos, estos son días de alegría y compromiso. También se imparten clases por la tarde para aprovechar más el espacio en las aulas y respetar las distancias de seguridad. En las próximas semanas, con la readmisión de otras clases, las lecciones también tendrán lugar los fines de semana.
En esta fase es particularmente importante transmitir el conocimiento adecuado acerca de las medidas para evitar el contagio. Por eso, gracias al proyecto "Creciendo juntos en Uganda: hacia una ciudadanía activa entre los jóvenes" apoyado por el "Ocho por Mil" de la Iglesia Católica Italiana, la Comunidad está distribuyendo, además de material escolar para reanudar los estudios, mascarillas y desinfectantes.
Estos son los primeros pasos de un proyecto que la Comunidad también está llevando a cabo en colaboración con la diócesis de Arua. En los próximos dos años, además del apoyo escolar y alimentario para los menores refugiados, también se prevé la implementación de estructuras escolares con la construcción de nuevas aulas.