En La Habana, en la casa de la Comunidad de Sant’Egidio, los numerosos sintecho de la ciudad vivieron un día especial, uno de aquellos que difícilmente podrán olvidar. La ayuda de muchas personas permitió que muchos sintecho se sentaran a la mesa para degustar una gran paella de amistad y solidaridad.
Hicieron la paella un grupo de comerciantes que, al menos una vez al mes, se hacen cargo de la cena para los "amigos de la calle". Se pusieron en contacto con un paellero español, Pepe, que fue a cocinarla y a servirla gratuitamente. Cenaron ochenta personas.
¡La Comunidad de Sant’Egidio también es esto!