"El uso de las armas siempre es insensato. Cuando nació Sant’Egidio hace 50 años el eslogan era 'poner flores en los cañones'. Luego algunos empezaron a afirmar que era lícito en algunos casos el uso de las armas, y hoy hay quien dice que incluso para llegar a la paz hacen falta muchas armas. Para nosotros, entonces y ahora, son discursos sin sentido, nosotros mantenemos un 'no' a las armas sin 'si' y sin 'peros'".(sigue leyendo)