Los Jóvenes por la Paz, que hace poco se han reunido en París provenientes de toda Europa, han manifestado hoy su dolor ante el terrible atentado de Rouen y su firme decisión de continuar siendo constructores de puentes y no de muros, para una Europa y un mundo pacificados.
Hoy, los Jóvenes por la Paz, sentimos dolor. Apenas hace dos semanas hicimos un llamamiento por la paz.
Aquel llamamiento todavía no ha tenido respuesta y es tarea nuestra, de los Jóvenes por la Paz, continuar difundiéndolo.
Nosotros, los Jóvenes por la Paz, no cederemos al miedo; nosotros, los Jóvenes por la Paz, nos mantendremos firmes.
¡No nos rendimos, echaremos abajo los muros del odio y de la violencia!
¡Seremos apóstoles de la civilización del amor construyendo puentes de paz y de amistad entre todos!
Oraremos esta tarde a las 18.30 h en la iglesia de San Pedro (94220 Charenton-le-Pont) por el padre Jacques Hamel con todos los hombres y las mujeres de buena voluntad, porque nuestras armas son la oración, el amor y la fraternidad.
Oraremos también por los heridos y estamos a su lado en el dolor y la esperanza de que se curen pronto.
Hoy, como Jóvenes por la Paz, nuestra respuesta a todos estos actos bárbaros es sencilla: ¡nosotros respondemos con la paz!"