Esta mañana el presidente de la República Centroafricana, Faustin Archange Touadera, ha visitado a la Comunidad de Sant’Egidio en Roma. Tras un largo coloquio con el fundador de la Comunidad Andrea Riccardi, el presidente explicó en conferencia de prensa la situación del país, donde Sant'Egidio trabaja desde hace años para fomentar la paz.
Touadera ha agradecido a la Comunidad por su trabajo que permitió firmar en junio un acuerdo entre los distintos grupos político-militares que hay en el país y poner así en marcha el proceso de paz.
«Tras el acuerdo firmado en Sant'Egidio –ha dicho el Presidente–, y a pesar de los graves problemas que tiene nuestro país, como el de los desplazados, hemos realizado algunos avances en la desmovilización de los grupos armados. Los próximos días finalizará el “programa piloto” de desarme, con la reinserción en la sociedad civil o en el ejército de 600 combatientes pertenecientes a 12 de los 14 grupos armados existentes.
Ahora está a punto de empezar la fase del verdadero desarme general y contamos con la participación de todas las fuerzas sobre el terreno, incluidos los dos grupos que quedaron fuera de la primera prueba de desmovilización».
Tras recordar el valioso apoyo al país que fue la histórica visita del papa Francisco en noviembre de 2015 y alegrándose por el interés mostrado por la cooperación y los empresarios italianos por la República Centroafricana, Touadera ha hablado también de los muchos problemas que todavía hay en el país, desde la necesidad de ayudar a la economía lastrada por la guerra en las zonas donde el Estado todavía tiene problemas por afianzar su control: «Confiamos –ha dicho– en un despliegue más amplio de las fuerzas de la MINUSCA de la ONU para acelerar el proceso de paz».
El proceso de paz en la República Centroafricana en 5 puntos >>