El martes 9 de febrero salió de la Ciudad Ecosolidaria de Roma, el espacio de solidaridad donde la Comunidad de Sant’Egidio recoge alimentos, ropa y otros productos para repartir entre los pobres, un contenedor de ayuda alimentaria destinada a las franjas más débiles de la población burundesa, víctima de una crisis que afecta al país desde hace meses, y de la que hemos dado noticia en esta web varias veces y que, por desgracia, se agrava cada vez más. Hoy la crisis alimentaria es evidente en todo el país. La OCHA la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, calcula que unas 700.000 personas en Burundi carecen de los alimentos necesarios para vivir. Se trata del 7% de la población de aquel país pequeño y superpoblado (400 habitantes por km2) donde el 80% de los habitantes viven bajo el umbral de la pobreza y donde ya antes de la crisis había un estado de malnutrición crónica que afectaba a una de cada dos personas.
El contenedor, que se ha podido enviar gracias, entre otros, a la ayuda del Programa Mundial de Alimentos Italia, salió cargado con 2000 kg de arroz, 1000 kg de azúcar, 3000 kg de legumbres y 2000 kg de barritas energéticas, por el puerto de Civitavecchia y tardará unos 35 días en llegar a su destino. Hasta ahora, gracias a la recogida online a través de la web de la Comunidad de Sant’Egidio, se han podido repartir unos 2000 paquetes de alimentos entre la población desde septiembre. Los repartos se han llevado a cabo en varios barrios de la capital, Bujumbura, y han llegado sobre todo a niños y ancianos. La llegada del contenedor permitirá llevar ayuda también a los numerosos pobres que viven en otros puntos del país, en las distintas ciudades donde está presente la Comunidad de Sant’Egidio.
