El domingo 28 de julio se celebra la IV Jornada Mundial de los Abuelos y los Mayores que instituyó el papa Francisco. El tema de este año es «En la vejez no me abandones», versículo del salmo 71, aunque recuerda la triste realidad de que los años de la vejez se caracterizan por el abandono y la soledad, por la “cultura del descarte”, también es una invitación a promover el encuentro, la visita, el cuidado de los ancianos por parte de las generaciones más jóvenes. Si por una parte en ellos es evidente la fragilidad de la vida, también es evidente su carisma de construir lazos entre generaciones.
Son muchos, los eventos y las celebraciones en esta Jornada que impulsa la Comunidad de Sant’Egidio en varias partes del mundo:
En Roma una numerosa delegación de ancianos participa en la liturgia de la iglesia dedicada a los santos Joaquín y Ana. Al finalizar la celebración, la Comunidad ofrece una comida a algunos cientos de ancianos en la Australian Catholic University.
Los ancianos de la Comunidad de Sant’Egidio de Roma, además, han querido tener un gesto de cercanía y cariño con los ancianos de Ucrania, que en este tiempo viven la tragedia de la guerra y sufren especialmente por el abandono, la pérdida de relaciones humanas y familiares. Estos días ha salido un cargamento de material para ellos que llegará a muchos ancianos a los que las comunidades de Sant’Egidio de Ucrania visitan en muchas residencias de las ciudades de
Kiev, Leópolis e Ivano-Frankivsk. La amistad que la Comunidad de Sant’Egidio de Ucrania tiene con los ancianos de las residencias se remonta a los años 90 y nunca se ha interrumpido. Es más, durante la guerra ha aumentado. Muchos jóvenes van a visitar fielmente a los ancianos de las residencias y muchos lazos de ternura y amistad crecen viviendo ya hoy un futuro de paz. Más de mil ancianos ucranianos recibirán, para esta ocasión de fiesta, un regalo de los ancianos de Roma: cantimploras y abanicos de vivos colores.
El programa ¡Viva los Ancianos! también ha impulsado numerosas iniciativas en varias ciudades de Italia como Brindisi, Catania, Padua o Florencia, por citar algunas.
Y en el mundo: Gran fiesta en Kampala, (Uganda), en la casa de la Comunidad. Ocurre lo mismo en Santiago de Cuba, donde durante una semana se han llevado a cabo actividades de amistad entre jóvenes y ancianos, selladas por el II Congreso del programa ¡Viva los Ancianos!.
En Hong Kong, en la residencia de Tung Chung, los jóvenes han mostrado a los ancianos el mensaje del papa Francisco. También en varias ciudades de Indonesia, desde Semarang hasta Yakarta o Medan, ha habido visitas y fiestas en las residencias. En la isla de Timor los jóvenes han visitado a los ancianos que viven aislados en el campo cerca de la frontera.