El Fiscal General de Estados Unidos, Merrick B. Garland, ha suspendido la pena de muerte federal a través de una comunicación del 1 de julio, en la que ordena que se revisen los procedimientos. El memorando denuncia el aspecto "arbitrario" de la pena de muerte y su "impacto desproporcionado entre personas negras", preocupaciones junto a otras que "requieren un atento análisis y valoración por parte de los legisladores".
Que se centre la atención en el continuo recurso a la pena de muerte en Estados Unidos es significativo en un momento en el que se reanudan las ejecuciones tras una suspensión debida a la emergencia sanitaria. El 30 de junio, la última ejecución aplicada en Texas quitó la vida a John Hummel, para quien una movilización internacional, también a través de la campaña "No Death Penalty" de Sant’Egidio, había pedido medidas alternativas a la pena capital.
Documento
Moratorium on federal executions pending review of policies and procedures