Este año el "espíritu de Asís" llegó a Abijan en un clima marcado por la violencia, que ya ha causado víctimas y heridos durante algunas manifestaciones en varias ciudades de Costa de Marfil.
El domingo 25 de octubre en la sede de la Comunidad de Sant'Egidio, a pocos días de la votación de las elecciones presidenciales, dirigentes cristianos pertenecientes a las distintas Iglesias presentes en el país junto a dirigentes musulmanes, repetían en voz alta "nadie se salva solo". En comunión con el encuentro internacional que tuvo lugar en Roma el pasado 20 de octubre, los imanes de Costa de Marfil junto con los líderes de la Conferencia Episcopal local, la Arquidiócesis de Abijan, y las iglesias Metodista, Bautista y otras denominaciones cristianas, lanzaron un mensaje de "paz y fraternidad" a través de sus discursos y oraciones.
El nuncio apostólico Paolo Borgia trajo el saludo del Papa Francisco, retomando algunas partes del discurso pronunciado por el propio Papa el 20 de octubre.
Al final del acto, en una sala llena, aunque respetando las medidas anti-Covid, todos los líderes encendieron el candelero de la paz y firmaron un llamamiento en el que enfatizan el papel que juegan las religiones al disociarse de cualquier manifestación de violencia. En este sentido, el llamamiento también compromete a las distintas confesiones religiosas a intervenir en los próximos días ante la posible instrumentalización de las religiones y las posibles amenazas a lugares de culto. Pero también pidieron a los líderes políticos que fomenten la reconciliación real en el país. El llamamiento por la paz será entregado a estos últimos, así como a los representantes de las instituciones.
