El pasado fin de semana la Comunidad de Sant’Egidio repartió paquetes de alimentos y de productos de higiene personal a más de 600 familias de desplazados provenientes de las zonas afectadas por la violencia que azota el norte de Mozambique. La ayuda se repartió en 3 centros de la provincia de Nampula y de Cabo Delgado junto a Cáritas diocesana de Pemba y al obispo Luis Fernando Lisboa.
Algunos desplazados han sobrevivido al último duro ataque que se produjo en Mocimboa da Praia a finales de junio. Las personas llegan a los lugares de acogida extenuadas y sin nada. Ya no tienen la tierra que cultivaban y han perdido la casa pasto de las llamas. Pero ante todo piden comida.
Todos han recibido alimentos, recipientes para el agua, jabón y mascarillas que ha confeccionado la Comunidad. Además de la ayuda concreta, también la compañía y la visita son un consuelo para las familias que necesitan encontrar esperanza.