En la víspera de la II jornada por los pobres, en la ciudad de México, el sábado 17 de noviembre se ha celebrado la liturgia de acción de gracias por el 50 aniversario de la Comunidad de Sant´Egidio, presidida por Monseñor Franco Coppola nuncio apostólico en México, quién durante su homilía ha dado un recorrido no solo histórico iniciando por aquella convicción de 1968 por Andrea Riccardi de querer cambiar el mundo empezando por cambiar el corazón de cada persona, sino también, nos ha recordado nuestra misión de cambiar el mundo desde el pilar de nuestros maestros: los pobres, que nos han enseñado a amar, a soñar y a creer que se puede construir un mundo para todos. “Gracias por hacer de este día, un día especial y diferente” ha comentado en varias ocasiones a los invitados: a los sin techo, niños de las escuelas de la paz y ancianos del asilo presentes a los que ha saludado y abrazado.
Muchos amigos que han estado en esta celebración tan especial acompañando a la Comunidad en un día tan importante, como el Padre Alejandro Solalinde quien a pesar de las ocupaciones que le representa el éxodo migrante de Centroamérica hacia México de las últimas semanas, se ha dado el tiempo para tomar “fuerza espiritual” con Santegidio por la amistad que le une a la Comunidad como ha dicho; y para finalizar tan bello festejo, se organizó un almuerzo con los invitados y como es toda una costumbre en México se cantaron las tradicionales “mañanitas”, este canto mexicano que se hace en cada festejo de cumpleaños acompañado del pastel (torta) para celebrar la vida de Santegidio.
