Con una procesión de pueblo por las calles de la ciudad empezó el 2 de diciembre la celebración del cincuenta aniversario de Sant’Egidio en Savè, pequeña ciudad del interior de Benín, donde desde quince años la Comunidad vive la amistad con los ancianos y el año pasado abrió para algunos de ellos una Casa Familia. Precisamente los ancianos, como invitados de honor, ocuparon los primeros puestos durante la misa.
La liturgia de acción de gracias, celebrada en una iglesia llena, en presencia de las autoridades locales, estuvo presidida por el obispo de Dassa, François Gnonhossou, que en su homilía dijo: "El cambio empieza por los pobres y por los ancianos. Los pobres son la piedra angular para cambiar la sociedad. ¡'Continuad por ese camino, junto a los ancianos, continuad abriendo corredores humanitarios! Los pobres son vuestro tesoro. La Comunidad de Sant’Egidio no podría seguir cincuenta años más si no se basara en la oración".