Ha pasado menos de un mes desde la firma del acuerdo de paz para la República Centroafricana, cuando en Sant'Egidio se llevaron a cabo las negociaciones entre representantes de las autoridades y de los grupos armados, que llevaron al acuerdo del 19 de junio para el alto el fuego, el desarme gradual y el inicio de un proceso de reconciliación nacional.
Esta mañana, en una conferencia de prensa, Mauro Garofalo, responsable de Relaciones internacionales de Sant'Egidio, que volvió hace unos días de una misión en Centroáfrica, analizó la situación del país tras el acuerdo de Roma. “El acuerdo está vivo y cuenta con el apoyo de una fuerte y renovada voluntad de paz de todas las partes de la crisis centroafricana, tanto en el campo civil como en el religioso”, ha afirmado Garofalo, que durante su visita a Bangui se reunió con el presidente Touadéra, con ministros y diputados de la Asamblea nacional, con los líderes de las formaciones político-militares y con autoridades religiosas, como el cardenal Nzapalainga.
Este último recibió a la delegación de Sant'Egidio con otros miembros de la Conferencia episcopal centroafricana, a quienes manifestó su apoyo al acuerdo. También el presidente Touadéra mostró su apoyo y su confianza en el proceso de paz, y calificó el acuerdo de Roma de "histórico". Al recibir en la sede de la Presidencia de la República a todos los representantes de los grupos armados firmantes del acuerdo, les dijo: "Con el acuerdo de Roma ustedes han demostrado que quieren entrar en la historia por la puerta principal".
Por último Garofalo confirmó la voluntad de la Comunidad de Sant’Egidio de acompañar y ayudar en la implementación del proceso de paz, y destacó la "necesidad de salir de la espiral de violencia mediante una dinámica de reconciliación y de perdón". Por eso Garofalo ha anunciado que, "en los próximos días se creará un 'Comité de Suivi' formado por representantes de la Presidencia, de la Asamblea nacional, de los grupos armados, de la Misión de la ONU y de la Comunidad de Sant’Egidio".
El principal objetivo de este "organismo ligero", ha dicho Garofalo, "será el de aplicar las medidas previstas por el acuerdo, analizar y, en cada caso, resolver los problemas que surjan en el proceso de desarme. Ha llegado el momento de que Centroáfrica pase página. Con el acuerdo de Roma se pone en marcha un proceso que dará a millones de centroafricanos la paz y la posibilidad de llevar una vida normal".
