En la celebración por los 60 años de la fundación de la Universidad Católica del Sagrado Corazón de Roma, el viernes pasado, el papa Francisco se encontró con los residentes de la Villetta della Misericordia, el primer centro de acogida de Roma para personas sin hogar que se encuentra en una zona universitaria y hospitalaria.
El papa Francisco ha hablado con cada uno de ellos y ha escuchado sus historias, incluso las de quien, tras recibir la asistencia médica que necesitaba y la ayuda para volver a tomar las riendas de su vida, ha encontrado un empleo y vive en una casa, o ha vuelto con la familia. Entre ellos, algunos durmieron durante años en urgencias o en las salas de espera de los ambulatorios. Algunos han abandonado el alcohol, una patología grave, que suele ir acompañada de la vida en la calle. Uno de los antiguos residentes le pidió al Papa que rezara por su país, Pakistán, tras explicarle que él, aun siendo musulmán, reza en comunión con todos por la paz.
Qué es la Villetta della Misericordia
La Villetta nació en 2016 por iniciativa de la Fundación Policlinico Universitario A. Gemelli IRCCS, del Istituto Giuseppe Toniolo di Studi Superiori, de la Universidad Católica del Sagrado Corazón y de la Comunidad de Sant'Egidio. Admite hasta veinte personas, hombres y mujeres italianos o extranjeros sin hogar. Alberga preferentemente a personas sin techo que ya eran habituales de la zona del Policlinico A. Gemelli. El centro ofrece un alojamiento digno a muchas personas que buscan refugio por la noche, a veces incluso en las salas de espera de los servicios de urgencia o en los jardines de los hospitales. En estos cinco años se ha creado un modelo de hospitalidad replicable también en otros centros hospitalarios.
La gestión de la Villetta della Misericordia corre a cargo de la Comunidad de Sant’Egidio, que gracias a la experiencia y a la sensibilidad que ha desarrollado hacia las personas sin hogar a través de la red de servicios que lleva a cabo en Roma y en muchos lugares del mundo, brinda el hospitalidad y el acompañamiento del día a día a los residentes con el apoyo de personal voluntario.
Cada residente puede estar un periodo de tiempo en la Villetta della Misericordia en función de su situación social, siguiendo un proyecto personalizado. Los residentes reciben respuestas de tipo social a varios niveles, en conexión con los servicios sociosanitarios territoriales, como por ejemplo: ayuda socioasistencial, contacto e implicación de las familias, recuperación social y animación, reinserción laboral, además de la cena, una cama, ducha, desayuno y muchas cosas más.
En estos años han pasado por la casa más de 150 personas en situación de extrema pobreza, especialmente enfermas. Muchas de ellas han recibido ayuda para una progresiva reinserción social y familiar, con soluciones habitativas como el cohousing, las casas familia, el retorno a las familias, nuevos núcleos familiares, etc.; algunos han recuperado su empleo gracias a la mejora en su estado de salud, a las atenciones recibidas y a los itinerarios de acompañamiento personalizados.Esa es la especificidad de la Villetta, que está dentro de un campus hospitalario y universitario: la cercanía al hospital hace que forme parte de un lugar de cuidados y de consuelo –como dijo el papa Francisco el viernes durante la homilía–, un centro que si estuvieran en otro lugar perdería la excelencia que la hace aún más única en su especie.
En 2017 empezó el programa de desintoxicación del alcohol y las enfermedades asociadas para personas sin hogar en colaboración con la Unidad Operativa de Alcoholismo de la Fundación. Se han publicado estudios en revistas internacionales por los sorprendentes resultados de recuperación del alcohol en personas tan vulnerables. Este estudio se está convirtiendo en una buena práctica para otros centros sanitarios.
En torno a la Villetta en estos años se ha creado una red de apoyo, entre estudiantes de Medicina y Enfermería, médicos, enfermeros, personal de la Fundación, religiosas de los institutos limítrofes y escultistas de las comunidades parroquiales de los alrededores.
Son muchas, las iniciativas de solidaridad que se llevan a cabo, como la cena de Navidad con los residentes de la Villetta y las personas sin hogar de la zona, fiestas con estudiantes, encuentros y cenas de beneficencia con el personal de la Universidad y de la Fundación, junto a las celebraciones litúrgicas en momentos especiales del año.