El día en el que cumplía 56 años, el 15 de septiembre de 1993, el padre Pino Puglisi fue asesinado por la mafia por su constante trabajo evangélico y social en el barrio de Brancaccio de Palermo.
Dijo el padre Pino Puglisi: "Jesús dijo: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame». Tomar la cruz para ser discípulo de Jesús puede parecer algo que da miedo, pero si queremos crecer debemos seguir esa lógica. Si queremos continuar siendo inmaduros, entonces rechazaremos la lógica de la cruz, la lógica del grano de trigo. Quien quiere crecer debe acoger la lógica del grano de trigo... Debemos vivir en gracia: este es el secreto para no tener miedo a la muerte, para no morir. El secreto para saberla afrontar con valentía, es más, con alegría, es morir durante la vida, mortificándose, saberse distanciar, es decir, saber vivir tendiendo al cielo".
El padre Puglisi fue beatificado el 25 de mayo de 2013 y su estola se conserva en la basílica de San Bartolomé de la Isla de Roma, memorial de los mártires de los siglos XX y XXI.
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