Miles de personas han cruzado esta año la Puerta Santa de la catedral de San Pedro de Lima, en Perú, en ocasión del Jubileo de la Misericordia, pero los que cruzaron la Puerta el pasado 15 de octubre eran peregrinos especiales, ancianos pobres, que viven en el Albergue Canevaro, un centro para personas sintecho de la catedral peruana, que vivieron un día de peregrinación junto a la Comunidad de Sant'Egidio..
La amistad con los ancianos del Canevaro nació hace 15 años. Cada domingo jóvenes y adultos de Sant’Egidio visitan a los ancianos, muchos de los cuales no tienen familia. «Gracias porque han venido a buscarnos hasta este asilo para permitir que vivamos esta linda experiencia, que Dios les bendiga!, son las palabras emocionadas de Malena, una anciana que perdió su casa y vive desde hace años en el Canevaro.
Junto a ellos, participaron en la peregrinación personas que viven en la calle y que son amigos con quienes la Comunidad se encuentra cada semana en la «cena itinerante» por las calles de Lima.